Manuela Troncoso y Lira
(1782- )

Soldado del regimiento Provincial de Segovia

manuela troncoso

Gallega nacida en Tuy (Pontevedra), Manuela se casó con Domingo Álvarez, con el que tuvo un hijo de nombre Manuel. Cuando se quedó viuda y sin recursos, se echó a los caminos con su hijo y en el año 1809 trabajaba probablemente como cantinera o lavandera en un regimiento de infantería español. Terminó siguiendo al regimiento Provincial de Segovia, unidad que se incorporó a la guarnición de Ciudad Rodrigo en febrero de 1810.

El 12 de junio de 1810, Manuela se casó en Ciudad Rodrigo con Bernardo Miravalle, sargento primero del Provincial de Segovia, poco después de que su hijo Manuel, que por entonces contaba con diez años, se integrara en ese mismo regimiento como Tambor.

Con un marido y un hijo participando en la defensa de la plaza, Manuela no se lo debió pensar dos veces y se presentó al gobernador Herrasti para que le permitiera tomar las armas y correr el mismo destino que cualquier otro soldado de la guarnición. La petición le fue concedida y, vestida y armada como un soldado más, prestó los servicios que se le encomendaron, por lo que se le asignó la ración y la prestación correspondiente.

Tras la capitulación de la plaza fue hecha prisionera de guerra y conducida a Francia junto con su marido y su hijo, permaneciendo en ese país hasta el año 1814, en el que la firma de la paz les permitió regresar a España.

El 29 de abril de 1815, Manuela Troncoso solicitó del rey que se le confirmase la prestación y ración que le asignó el gobernador Herrasti. Esta solicitud iba acompañada de un informe del mismo Pérez de Herrasti y de otro del Marqués de Quintanar. El veredicto del funcionario de turno fue positivo y la petición llegó hasta el rey, que accedió a la concesión del sueldo y la ración de pan correspondientes a la clase de sargento segundo por haberse portado «con el mayor valor y bizarría al lado de su marido en todos los puntos a que fue destinado el expresado cuerpo hasta la rendición de dicha plaza…»